Cuando vi una estufa por primera vez en mi vida y me costó dos meses darme cuenta de que estaba rota
Cuando descubrí que vivir con tres mujeres significa tener abrazos y hombros para llorar las 24 horas del día
Cuando aprendí que vivir con tres mujeres significa despertarte y saludar a un tío distinto cada semanaCuando aprendí a poner una lavadora, y a martillar un armario con un tacón de aguja
Cuando bailé en la mesa del salón hasta morir de risa
Cuando se me llenaban los ojos de lágrimas al hablar de mis hermanas y de mis padres
El 2009 fue un año duro aunque no lo parezca, pero aquí he intentado resaltar lo positivo. Para este año que entra tengo unas perspectivas desoladoras, pero eso no importa, a finales del 2010 crearé de nuevo esta lista y comprobaré cómo, definitivamente, no fue tan malo.
Feliz año a todos.